Si hay una tarea de casa que no me gusta nada, esa es limpiar los cristales y además de que no me gusta nada, con el gafe que tengo, el tiempo se confabula en mi contra y en cuanto los limpio llueve.
Así que comprenderéis que ni de lejos sea una tarea agradecida para mí y ya ni contaros cuando vienen niños a casa y ponen sus deditos pequeños encima de mis cristales recién limpios, me da de todo, aunque soy de las que no dice ni mu.
Sí, sé de sobras que hay infinidad de métodos para limpiar nuestros cristales y que queden perfectos, pero ni con esas, es una faena que me guste y es más, creo que lo odio, porque encima en mí casa, hay varias ventanas que dan directamente a la calle y claro se me hace casi imposible limpiarlas por fuera. Cada vez que me subo en un taburete para limpiarlas parece que estoy haciendo gimnasia rítmica de las posturas que tengo que poner, para no caerme al vacío. Así que desde aquí suplico a los señores constructores, que se compadezcan un poco, de las señoras que tenemos que limpiar nuestros hogares y nos faciliten un poco la tarea.

Si quieres realizar una limpieza ecológica en tu hogar, no te pierdas el post que escribí el otro día y que tanto gustó en el blog, porque realmente está cargado de buenos consejos de esos que nos facilitan la tarea diaria, a todas aquellas almas venditas que por suerte o desgracia, tenemos que limpiar nuestras casas de vez en cuando. Otro consejos que os di también hace tiempo era para limpiar el microondas y que os quedase súper bien, espero que ya lo hayáis probado todos sin excepción, si es así espero que me comentéis si os ha gustado o no.
Vamos a ver nuestros trucos