Hoy os traigo uno de mis aperitivos preferidos. Es rápido y fácil de preparar y seguro que os gustará a todos, vamos exceptuando si tenéis algún comensal que sea alérgico a las gambas o al que no le guste el queso, que también los hay. Hacía tiempo que no lo preparaba y como el otro día vinieron unos amigos a comer, me dije: éste seguro que lo hago y hasta me dio tiempo a hacer las fotografías medio decentes antes de que llegaran nuestros amigos.
Los otros aperitivos que también preparé en esta ocasión son los huevos de colores y las tartaletas de atún, seguro que os gustan porque los dos se hacen en un momento y como yo podéis tener listos en un momento unos aperitivos originales y que les encantarán a vuestros invitados.
Ingredientes:
- 1 lámina de hojaldre
- gambas grandes (descongeladas y peladas)
- queso de untar (yo utilicé queso de tarrina Camembert)
- 1 huevo
Preparación:
En la bandeja del horno extendemos una hoja de papel de hornear. Precalentamos el horno a 200ºC mientras vamos preparando los saladitos. Primero pasaremos las gambas por queso, yo las fui metiendo directamente en la tarrina del queso, a continuación las forramos con el hojaldre, de tal manera que hacemos un rulo. Vamos extendiendo en la bandeja del horno los saladitos un poco separados entre sí.
Una vez los tenemos todos colocados los vamos pintando con la ayuda de un pincel de cocina con huevo batido. Ahora los introducimos en el horno unos 20 minutos aproximadamente o hasta que veamos que están dorados.
Probadlos que seguro os gustarán.