¿Cómo adaptar nuestro entorno para mejorar la accesibilidad?

Tener edificios, viviendas, productos o servicios accesibles, es responsabilidad de todos y si queremos no excluir a nadie la accesibilidad debe ser una de nuestras preocupaciones. Cualquier persona debe ser capaz de acceder a espacios comunes y nos tiene que preocupar si esto en algún momento no es así. Así pues, debemos incidir en una mejora de la movilidad, de la comunicación y de la comprensión.

¿Cómo adaptar nuestro entorno para mejorar la accesibilidad?

El próximo día 12 de mayo es el día de la Accesibilidad, y aprovechando tal día Stannah España, líder fabricante mundial en movilidad, está dispuesto a resaltar lo importante de adecuar los espacios, productos y servicios a todas las personas, sin importar su condición.

Es por ello que Stannah España, propone que conozcamos todos los tipos de accesibilidad (cognitiva, sensorial y física) y así, poder conformar un entorno universal que ayude a mejorar la inclusión de todas las personas.

La accesibilidad física, quizás es la más conocida. Y es la que permite sin ninguna traba el acceso fácil de las personas a los lugares. Este acceso fácil debe ser igual para personas en sillas de ruedas, bebés en cochecitos o personas mayores con movilidad reducida. En este caso existen diferentes alternativas, siempre dependiendo del espacio. Dentro de una vivienda podemos contar con sillas salvaescaleras, ascensores unifamialiares y duchas en lugar de bañeras. En los espacios públicos podemos salvar los desniveles con rampas no muy inclinadas.

Para mejorar la accesibilidad cognitiva, es necesario que la tecnología, los carteles y los textos cumplan con algunas condiciones y nos ayuden a mejorar su comprensión. En este sentido, una de las iniciativas más común para mejorar la accesibilidad cognitiva es la lectura fácil, aunque no es la única. Utilizar símbolos claros y tipología grande, puede marcar la diferencia y puede ayudarnos a mejorar la comprensión de muchas personas. La accesibilidad cognitiva está pensada para personas mayores, niños o personas con discapacidad intelectual.

Si queremos mejorar la accesibilidad sensorial, podemos adaptar carteles al sistema Braille, para personas invidentes, o adaptar con subtítulos o traducciones la la lengua de signos los vídeos para las personas sordas. En la vía pública los pitidos de los semáforos son un ejemplo de accesibilidad, gracias a él las personas con problemas de visión pueden cruzar con seguridad, a la vez que las personas que tienen problemas auditivos se ayudan de los colores para cruzar.

Para facilitar la accesabilidad en tu vivienda, deja las zonas de paso despejadas. En los lugares de descanso, como sofás, camas o sillas, no interpongas delante ningún elemento, que pueda interceder el paso de las personas. Procura que todas las puertas se puedan abrir por completo, y que sean lo suficientemente grandes por si fuese necesario pasar una silla de ruedas. En el baño tal y como te he contado antes, si tienes bañera, substitúyela por una ducha y procura que la ducha tenga donde agarrarse. Estos consejos también son útiles para las personas mayores con movilidad reducida, no sólo para las sillas de ruedas.

Espero que te haya gustado el post de hoy y que te haya servido para conocer mejor cómo puedes mejorar la accesibilidad de tu entorno.

Si tienes cualquier duda o sugerencia, déjame un comentario en este post y te responderé lo antes posible.

Y tú, ¿tenías claro cómo puedes mejorar la accesibilidad de tu entorno?

Un abrazo y hasta el próximo post.

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