Como ya os dije el otro día por Facebook, iba a intentar hacer una Panna cotta de cerezas y lo cierto es que salió espectacular. Este postre es muy típico en Italia, realizado a partir de gelatina, nata y leche. Tiene que tener consistencia, pero si lo ponemos en un plato y lo movemos la Panna Cotta tiene que moverse sin deshacerse. Así que pensé: "bueno como ya he hecho en otras ocasiones y ahora tenemos cerezas en casa, pues listo!, de cerezas la vamos a hacer!. Supongo que os gustarán las cerezas a la mayoría pero de no ser así, no hay ningún problemas porque las sustituyáis por alguna otra fruta.
Ingredientes:
- 200 ml de leche (yo he utilizado desnatada que es la que tenía)
- 200 ml de nata para montar
- 3 cucharadas soperas de azúcar
- 3 láminas de gelatina
- 10 cerezas (si queréis un sabor más intenso podéis poner más sin problemas)
- 50 ml de agua
Preparación:
Deshuesamos las cerezas y las picamos junto con 50 ml de agua y 1 cucharada de azúcar. Ponemos esta mezcla en el fuego en cuanto rompe a hervir retirar y dejar enfriar. Hidratamos las láminas de gelatina neutra en agua bien fría. Ponemos en un cazo a hervir la nata con la leche y cuando rompe a hervir le añadimos las láminas de gelatina y 2 cucharadas de azúcar, retiramos del fuego y batimos hasta que la gelatina esté deshecha. Ahora es cuestión de poner las mezclas en nuestros boles, primero pondremos una pequeña capa con la mezcla de las cerezas y por encima la otra mezcla. Dejaremos enfriar en el frigorífico la Panna Cotta, hasta que cuaje.
Esta Panna Cotta, podéis hacerla de otra fruta que os guste, sólo tendréis que sustituir las cerezas y listo.